Guadalupe Suarez

  Para este trabajo, con el grupo decidimos retratar situaciones donde un sujeto se encuentra dentro de un espacio donde parece que busca algo más de lo que puede ver a simple vista. Nos pareció importante denotar esta diferencia de espacios entre "lo que se ve" y "lo que se quiere ver" mediante el uso de colores (en este caso complementarios) que funcionen como gran contraste entre ambos mundos. La elección de estos colores (en mi caso rojo y verde) fue realmente casual ya que fueron los únicos filtros de luz caseros que pude rescatar y armar en mi casa. Sin embargo, no por ello carecen de significado. Hace unas semanas, mi madre decidió que era buena idea poner unas plantas en la escalera y las ubico en el único lugar donde no da el sol. No sé como esas plantas continuan sobreviviendo. Es por eso que me pareció buena idea retratar, utilizando el colore verde, esta extraña idea de "vida" en un espacio muy particular de mi casa donde no parece haberla. En

Siempre me dieron miedo las escaleras de mi casa. De chica apagaba la luz y las subía corriendo porque tenía terror a la oscuridad. Hoy en día no lo hago más (por suerte) pero igualmente le tengo cierto respeto a la oscuridad y no me divierte tanto caminar con las luces apagadas. En estas imágenes intenté retratar esa mirada que yo tenía de chica sobre las escaleras durante el día y durante la noche, esta diferencia entre unas escaleras más amigables, inocentes, calmas y transitables, y las escaleras que, para mi, eran temerosas e imposibles de pasar. Utilicé la luz natural para la primer foto y 2 luces artificiales para la segunda (una ubicada desde arriba de las escaleras y otra proveniente de la entrada de mi casa que generaba la sombra de las rejas de mi puerta). BACKSTAGE Bonus track

Nunca me gustó sacarme fotos y mucho menos que me saque otra persona. Me cuesta muchísimo posar y no tengo paciencia con la gente que le encanta sacar miles de fotos. No soy para nada fotogénica y tampoco disfruto mucho la idea de ser fotografiada. Igualmente, en el último tiempo, estuve intentando amigarme un poco más con la cámara y con mi familia y amigos que son fanáticos de las famosas selfies. De a poco me voy sintiendo más cómoda (por un período corto de tiempo claramente) y me presto al juego de las fotos.  Siguiendo con esta idea, se me ocurrió hacer este retrato en frente de un espejo tapándome la cara parcialmente, como demostración de mi relación distante con la cámara. Lo que hice fue sacar una foto de mi reflejo en el espejo. Además, justo encontré un lugar en mi habitación que entraba un poco de luz natural y me pareció gustó como quedaba. PLANTA DE LUZ